El consejero de Salud visita mañana el Rafael Méndez, donde ha empezado a funcionar el equipo de resonancia magnética donado por Amancio Ortega al Hospital Rafael Méndez en 2017
Mañana lunes, el consejero de Salud, Juan José Pedreño, visita la Unidad de Radiología del hospital general universitario Rafael Méndez, que cuenta con un equipo de Resonancia Magnética donado por la Fundación Amancio Ortega.
En 2017, la Fundación Amancio Ortega destinó a la sanidad pública española 320 millones de euros para la compra de aparatos de diagnóstico y tratamiento de cáncer. En concreto, la Fundación Amancio Ortega donó 11,7 millones de euros al Servicio Murciano de Salud (SMS) para la adquisición de 22 equipos de diagnóstico y tratamiento del cáncer. AL Hospital Rafael Méndez LE correspondieron un mamógrafo, un TAC (Tomografía Axial Computerizada) y un aparato de resonancia magnética.
El mamógrafo comenzó a funcionar a pleno rendimiento en 2019, trasladándose el viejo aparato al hospital Santa Rosa de Lima, en el centro de la ciudad, “donde seguirá desempeñando sus funciones, coincidiendo con la contratación de dos nuevos radiólogos que se han incorporado, según apuntó en su momento la gerente del Área III, Catalina Lorenzo.
Por otro lado, el TAC también se instaló, ofreciendo mayor resolución que el ya existente hasta ahora.
En cuanto a la resonancia magnética, valorada en 1,2 millones de eros, en 2020 se anunciaron las obras para su instalación presupuestadas en 718.000 euros, con un plazo de ejecución de cuatro meses, para la ampliación y reforma del área de diagnóstico por imagen.
En esta sentido, en septiembre la resonancia magnética ya se encontraba en pruebas, cinco años después y siendo el núltimo de estos aparatos que se ha puesto en funcionamiento de todos los donados a nivel nacional
La resonancia es una tecnología digital más eficiente para el diagnóstico y tratamiento de enfermedades oncológicas y gracias a él se mejorará la respuesta a los problemas de salud con una atención más rápida al paciente, se informó en su día desde el hospital lorquino. Pero, sobre todo, cabe destacar que reducirá el enorme gasto que tiene derivar estas pruebas a la sanidad privada.