Los hermanos Rodríguez superan una segunda etapa del Dakar que ha sido aún más dura que la de ayer
Los Hermanos Rodríguez, de la escudería aguileña Automotor 4×4, han superado una segunda etapa realmente épica, en creciente dificultad con un incremento de kilometraje, y de paisajes que han complicado mucho la conducción, incluso para los más expertos, sin olvidar las dificultades de navegación.
Cuando la etapa tiene tantos kilómetros, la mayoría de veces implica que la mayoría del tramo serán pistas rápidas, hoy los aguileños se han encontrado con numerosas llanuras de arena, pero que, además, estaban repletas de rasantes, saltos, piedras que han obligado a una tremenda concentración, por lo que se han enfrentado a un desgaste físico y mental superior al de ayer, aunque no ha impedido que el equipo aguileño Automotor 4×4 Competición fuera sumando km a km hasta conseguir culminar esta segunda etapa del Dakar 2021.
En los primeros 40 kms todos han encontrado una complicada sorpresa, unas dunas de arena muy suelta, que ya anunciaba ayer la organización por su color blanquecino, una arena con una textura muy fina, por tanto muy complicada de avanzar.
Aun así, la dificultad de la etapa de hoy no les ha impedido parar a ayudar a equipos que les necesitaban. Se han encontrado en pista a motos averiadas, incluso camiones volcados y atascados en trampas de arena, un escenario de los que hace que el Dakar tenga etapas épicas.
Los Hermanos Rodríguez aseguran que están muy contentos con el rendimiento del coche y la actuación de Borja al volante y a Rubén en cuanto a navegación.
Por su parte, el T3, pilotado por Pablo Oliva y Raúl Ortiz, ha completado una etapa con menos sobresaltos que ayer, por lo que han podido disfrutar de la conducción y del resultado.
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