Carlos Aguilera en el Irish Clan
La cervecería aguileña prosigue con éxito su ciclo de Monólogos de Humor, por el que han pasado ya numerosas figuras relevantes dentro del género
El actor durante uno de los momentos del espectáculo.
El local aguileño Irish Clan, prosiguiendo con su exitoso ciclo de Monólogos de Humor, presentaba el pasado viernes, día 5, el espectáculo de uno de los cómicos que está pegando fuerte dentro del panorama actual: Carlos Aguilera.
Con tres monólogos grabados esta temporada en el canal de TV Paramount Comedy, Carlos Aguilera se presenta como una de las revelaciones de la Stand-Up Comedy este año en España, según afirma el propio actor.
Con tres monólogos grabados esta temporada en el canal de TV Paramount Comedy, Aguilera se presenta como una de las revelaciones de la Stad-Up Comedy este año en España
En cuanto a su carrera como monologuista, hay que decir que Aguilera es bastante nuevo en esto, empezando el año pasado haciendo monólogos en SER Móstoles. En su haber cuenta con los premios obtenidos en algún que otro concurso y actualmente ha sido preseleccionado por Pepe Navarro para formar parte del equipo de guionistas de su nuevo programa en la primera de TVE.
Su forma de hacer humor se caracteriza porque “a todo le pone un pero”, sin embargo le irrita especialmente lo patéticos que pueden llegar a ser los hombres y las mujeres, la obsesión que tienen los padres con las obras, porqué la gente mayor cree que antes todo era mucho mejor, y por si fuera poco, tampoco entiende como hay gente que aún le sorprenda el circo, las ferias y los trucos de magia, pero sobre todo, intenta encontrar explicación al extraño fenómeno que se produce cuando se juntan un paso de cebra, un abuelete y un coche.
De todas estas situaciones cotidianas extrae Carlos Aguilera el hilo conductor de su espectáculo, marcado fundamentalmente por una concatenación de chistes, que, de manera atropellada, arrancan casi sin parar la carcajada del público, a quien también, a pequeñas pinceladas, va haciendo partícipe de las historias contadas sobre el escenario.
Un humor, por tanto, sencillo, donde prima fundamentalmente aquella temática “de toda la vida”, pero que el autor sabe hacer llegar a la contemporaneidad, mediante un juego que desemboca finalmente al sarcasmo y la ironía: las comparaciones, la visión surrealista de cualquier persona de a pié, etc., e incluso alguna que otra incursión en el gag, conforman el estilo de este joven actor.