‘Paparajote’ ya forma parte del Diccionario de la Lengua Española
Desde ayer jueves, la palabra ‘paparajote’ forma parte de la versión digital del Diccionario de la Lengua Española (DLE) que ha presentado la Real Academia Española. Pwro no lo hace sola, entran otras como por ejemplo: «Nueva normalidad», «bot», «cachopo», «vacunología», «transgénero» o «poliamor».
Un total de 3.836 modificaciones incluye este año la última actualización anual del DLE, la quinta consecutiva que realizan la RAE y la Asociación de las Academias de la Lengua Española (Asale), y que han presentado en rueda de prensa el director de la RAE, Santiago Muñoz Machado, y la académica Paz Battaner.Muchas de ellas reflejan la digitalización creciente de la sociedad, como «bot», «bitcóin», «criptomoneda», «ciberdelincuencia», «ciberacoso», «webinario», «geolocalizar» o «intro», pero también palabras ya existentes en el diccionario se «reinventan» con nuevas acepciones en ese ámbito.
La pandemia de coronavirus sigue dejando su rastro en el diccionario, como muestra la incorporación de nuevas acepciones para o la influencia de la pandemia como «cubrebocas» o «nasobuco» (formas habituales para aludir en algunos países a lo que en el español de España se llama «mascarilla»), «burbuja social» o «nueva normalidad».
«Hisopo» es definido ahora también como «palillo recubierto de algodón usado para la higiene personal o para tomar muestras biológicas de una parte del cuerpo».
Y «cribado» pasa a tener más acepciones para definir el examen médico para detectar una o más enfermedades.
Algunas de estas palabras proceden de Hispanoamérica, como ocurre con «emergenciólogo» y «urgenciólogo».
Casi 4.000 novedades
Si en 2019 fueron 1.100 las novedades introducidas en el DLE y 2.500 el pasado año, en 2021 se han elevado a cerca de 4.000 las modificaciones, que pasan un proceso hasta ser aceptadas, según ha explicado Muñoz Machado, ya que «no hay que precipitarse».
Gastronomía
Las novedades en materia gastronómica son muchas, entre ellas «cachopo», de la gastronomía asturiana, o «sanjacobo»; además del mecionado «paparajote», o el «rebujito» andaluz.
También han entrado «crudité», procedente del francés, o «quinoa», voz de origen quechua.
El «tinto» es otra de las entradas a las que se añade ahora la de «de verano» y también figura la adición de «balsámico» a la entrada «vinagre».
En lo que se refiere a americanismos, entran «buseca», «chuteador», «repentismo, «salvada» o «sambar», o la forma compleja de «valer madre» o «valemadrismo» para algo de poca importancia.
Todas estas modificaciones figuran desde hoy en la versión digital del DLE, que cuenta con el apoyo de la Fundación La Caixa, ya que aunque habrá una 24 edición del Diccionario en papel, todavía no hay fecha para su publicación.