Antes que nada

Antes que nada, disculparme ante quien pudiera sentirse molesto ,en lo personal o en lo grupal, que ambos sentimientos son válidos, por alguna frase de las que se publicaron en mi columna de la semana pasada.

Es cierto que equiparar a una etnia o grupo social concreto con los terroristas vascos puede molestar a cualquiera. Por ello pido disculpas sinceramente. También se han molestado un par de chicas por haber empleado incorrectamente la palabra vascuence en lugar de vasco como gentilicio ; con razón, realmente vascuence es todo lo relacionado con el idioma no con los individuos.

Si es que cuando uno se calienta……..
Y es que, aunque seas tranquilito, la cuestión de que el terrorismo provocado por unos chalados separatistas viene siendo la columna vertebral de nuestra realidad diaria desde hace tantos años que ya cansa y lo peor : que no sólo lo siga siendo, sino que cada vez lo es más.

A veces no parece que valoremos en la medida que lo merece que no tenemos conflictos con ningún otro estado, vecino o antigua colonia, que es lo habitual en nuestra historia , que hemos pasado cientos de años enfrentados a otros países por cuestiones de fronteras ( hasta 800 con los musulmanes ), de pugnas de monarcas, de robos de territorios o de barcos cargados de oro, de malos repartos de colonias africanas o americanas, de unos españoles contra otros incluso, de mil situaciones que han hecho tantas llagas en la piel de nuestro país, que ya es callosa y sufrida como ninguna otra.

Y ahora, que podríamos estar tan a gustito….., que en lugar de mandar emigrantes fuera, los buscamos para que nos hagan el trabajo duro, que estamos sobrados, que somos una potencia económica e industrial, que ni las derechas ni las izquierdas consiguen ya enfrentarnos como en el 36, que somos punto de descanso para millones de europeos cada año, a los que les cobramos por estar cerca de nosotros.

Entonces tropezamos en la misma piedra y dejamos que esa pandilla de chicos seguidores de un tal Arana sigan marcando nuestros tiempos. Y les hacemos el juego, conseguimos que nos dividan, que es la famosa táctica del enemigo : divide y vencerás. Ellos lo han conseguido, ya hay dos versiones del problema y dos soluciones contrapuestas para abordarlo : la de la izquierda con 11 millones de votos y la de la derecha con diez. Estupendo , el problema para arriba y nosotros cabreados.

Cada ciudadano tiene una solución para el problema, pero muchos coinciden en mayor medida que la de los políticos. Pero es que el ciudadano no saca beneficio de sus posiciones y los políticos cutres sí. Ahí está la cuestión, en que muchos no sabemos si es que no quieren o no pueden resolver. Después de tantos años, la falta de confianza parece estar en el mejor momento entre el ciudadano y su representante.

Las noticias de cada día parecen agoreras y depresivas : atentados, amenazas, luchas de bandas de macarras, matanzas de esposas, inmigrantes canallas que se han colado, etc. , junto con declaraciones de alguien para oponerse a algo. Nada o poco de lo que crecemos cada año, de que la sanidad mejora, de que no hay paro entre los españoles, de que el día a día de la mayoría va muy bien, nada o poco de lo positivo. Siempre puede aparecer un etarra diciendo o haciendo una gilipollez y fastidiar el resto de las noticias.
¿ No es para calentarse……?