Colocan piedra natural de gran tamaño para evitar que los vehículos causen daños en la zona protegida de Cabo Cope

La medida busca impedir la entrada de vehículos y caravanas, con el objetivo de evitar daños en los ecosistemas y en las dunas fósiles que se encuentran en la zona

Hace escasos meses, la Consejería de Medio Ambiente, Universidades, Investigación y Mar Menor anunció que iba a llevar a cabo dos actuaciones en el entorno de Torre de Cope y su duna fósil, en Águilas, por valor de 62.489 euros.

Así, con un presupuesto de 15.573 euros, se está llevando a cabo la reordenación de usos en el entorno de la Torre de Cope, en el Parque Regional de Cabo Cope y Puntas de Calnegre. En un primer momento, se ha delimitado mediante piedra natural la zona protegida para vegetación en áreas en restauración y las áreas de aparcamiento para vehículos. La medida busca impedir la entrada de vehículos y caravanas, con el objetivo de evitar daños en los ecosistemas y en las dunas fósiles que se encuentran en la zona.

Las dunas fósiles de Cabo Cope son un patrimonio natural único que alberga flora y fauna de alto valor ecológico. Sin embargo, la presión humana, especialmente el tránsito de vehículos, ha empeorado su conservación. Las piedras han sido colocadas estratégicamente para garantizar la protección del entorno, respetando a su vez los accesos habilitados para los visitantes a pie.

También está contemplado el control de acceso al Espacio Natural Protegido, mediante la construcción de cierres permanentes. En las zonas en restauración y en proceso de rehabilitación y replantación, está contemplada la disposición de cierres temporales de acceso hasta su conclusión. Ambos proyectos contemplan la gestión de los residuos que se generen y la actualización y mejora de la cartelería existente.

Además, con otro presupuesto de 46.916 euros, también se incluye la habilitación para uso público de la zona, retirando especies invasoras en un área de 640 metros cuadrados y residuos en el sendero que discurre hasta la Punta de la Cabrilla y Calabardina. Los trabajos también incluyen la restauración de los hábitats naturales del espacio protegido mediante plantaciones.

Cabo Cope cuenta con diversas áreas protegidas además de la del Parque Regional, que suma una extensión de 2.665 hectáreas. El accidente geográfico también está bajo la Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA) Almenara, Moreras y Cabo Cope, Lugar de Importancia Comunitaria (LIC) Cabo Cope y dentro de la Red Natura 2000. La actuación responde a la presión humana en los espacios protegidos, que requiere de medidas para la conservación de la biodiversidad, al tiempo que se facilita el acceso y disfrute público de la naturaleza de manera responsable.

Se trata, por tanto, de una iniciativa que es un paso esencial para preservar el equilibrio natural de la zona. Con estas medidas, se espera frenar la degradación del entorno y asegurar la conservación de este valioso paraje natural para las generaciones futuras.

Esta web utiliza cookies para que tengas la mejor experiencia de usuario. Si continúas navegando estás dando tu consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pincha el enlace para más información.

ACEPTAR
Aviso de cookies