Arte realizado en papel
El Concurso de Trajes de Papel se ha convertido en uno de los espectáculos más esperados por los aguileños en el Carnaval
«Como un cuento», tercer trofeo del pasado año.
Un año más, los trajes de papel volverán a brillar este Carnaval, por eso los cerca de veinte integrantes del taller de confección de estas obras de arte están ya trabajando a todo ritmo, para que el próximo 19 de febrero todos estén listos para ser lucidos. Este año, y según nos cuenta Ernesto, miembro de la Federación y uno de los coordinadores de este concurso, “se confeccionarán menos trajes que el pasado año. En principio pensamos hacer de seis a siete, aunque todo depende de lo que nos permita el tiempo”.
El motivo de esta disminución de diseños se debe a la problemática para encontrar un bajo adecuado donde realizar estas confecciones que debido a su voluminosidad necesitan de un local grande para poder realizarlas”, nos comenta Ernesto.
Este concurso, que cada vez va a más, tiene una espectacular acogida por parte del público
El concurso de trajes de papel tiene su origen en el año 1983, aunque en esa ocasión y debido a que no funcionaron demasiado bien se abandonaron. Años después la Federación de Peñas, buscando algo original, decidió recuperar este concurso que en esta ocasión si fue bien recibido por el público, tanto que ya ha alcanzado su sexta edición.
Además, si hay algo que caracteriza a este concurso es el gran apoyo de las casas comerciales, tanto es así que “este año se han ofrecido a colaborar más patrocinadores que trajes se van a realizar”, destaca Ernesto.
Además, el encargado de coordinar este concurso quiere destacar el importante papel que desempeñan las personas que colaboran en la elaboración de trajes que lo hacen “por amor al arte, pues no hay que olvidar que las casas comerciales solo patrocinan los materiales de los trajes”.
No obstante, la mejor recompensa es la espectacular acogida que este concurso tiene entre la población, muestra de ello es que este año debido a la imposibilidad de encontrar un local donde realizar los trajes se pensó en suprimir este concurso, y fueron muchas las personas que al enterarse acudieron a la Federación para pedir que no se abandonara este espectáculo que es ya un clásico del Carnaval.