Color y fantasía en las calles de Águilas
El pasacalles, que se alargó durante más de cinco horas, mostró un nivel superior al del pasado año
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Los desfiles de Carnaval son, sin duda, uno de los momentos más esperados por todos los aguileños y visitantes, al mismo tiempo que es el lugar para que las peñas de Carnaval, tras meses de trabajo, puedan enseñar a los aguileños y visitantes el resultado de tan ardua tarea. Más de 40 peñas salieron ayer a la calle llenando de color, magia y fantasía toda la localidad .
El Ballet Oficial de la Federación de Peñas, con un favorecedor diseño rojo y dorado, engalanado de plumas, fue el encargado de abrir el tan esperado desfile. Tras el, la Musa, Noelia Molina, sobre una gran carroza y dentro de un espectacular traje en colores plata y blanco enamoró a todos cuantos la observaban derrochando simpatía, bailando y animando a todos los carnavaleros y carnavaleras.
Mención aparte merecen las tres carrozas, con motivos egipcios, que sorprendieron a propios y extraños por su majestuosidad y cuidada elaboración en todos sus detalles. Dichas plataformas han sido posibles gracias a la empresa de origen vasco, Majestic, afincada en Águilas este año.
A continuación, hacían su aparición los individuales que, como cada año, lucieron originalidad. Acto seguido les tocaría el turno a las peñas infantiles de Azabache, Ipanema, Serpentina, Sinergia y Duende. Dichas formaciones formadas por los más menudos no se quedaron atrás, demostrando que el Carnaval tiene cantera para muchos años.
Este año, apenas fueron las peñas que se echaron en falta, al tiempo que fueron recibidas con una sonrisa y, sobre todo, aplausos, otras como Ipanema, que volvía a ser una de las protagonistas del desfile. Y es que, esta peña, sabe impactar como pocas lo han hecho en esta fiesta declarada de Interés Turístico Nacional.
Pero las más de cinco horas de desfile dieron para mucho. Los Zikitrake pusieron la nota original con sus “hamburguesas”; la Pirueta se hizo con los más pequeños poniendo a su disposición unos divertidos tiovivos; la peña Matalentisco Boys recrearon el mundo animado de Los Picapiedra; el Artilugio dio forma a un elegante Casino; Los Mismos de Siempre volvieron a poner la nota divertida; Cáucaso volvieron a lucir espectaculares y voluminosas espalderas llenas de plumas que, sin lugar a dudas, poniendo su toque de glamour al desfile; El Roncaor volvió a ser una peña crítica ironizando sobre la corrupción… y así un largo etcétera.
Un año más, Águilas logró brillar con luz propia llenando de aromas de Carnaval el ambiente y demostrando la calidad de estas fiestas declaradas de Interés Turístico Nacional.