VOX advierte de que la nueva PAC supondrá un duro golpe para el sector agrícola de las pedanías lorquinas
Piden al Ayuntamiento que la Concejalía de Agricultura colabore con sindicatos agrarios y asociaciones para prestar asesoramiento ante el nuevo marco normativo de la Política Agraria Común
Esta mañana VOX Lorca solicitaba al Ayuntamiento colaboración con las Asociaciones Agrarias para asesorar y ayudar a los agricultores lorquinos, principalmente los de las pedanías altas a la hora de enfrentar el nuevo marco normativo de la PAC que en España viene desarrollado por dieciocho Reales Decretos distintos, que el Gobierno de la Nación ha aprobado y que dificultan y penalizan la actividad agrícola.
José Martínez, concejal de la formación en Lorca, afirmaba que la “agricultura extensiva, cereal, almendro, vid… son representativas y propias de nuestras pedanías, un sector fundamental para ellas. A partir de ahora, quienes trabajan la tierra en estos sectores se verán inmersos en un infierno burocrático de estudios, permisos, penalizaciones… que harán que su trabajo sea menos productivo y menos rentable”.
Martínez asegura que el sector agroalimentario español debería ser considerado un sector estratégico y lamenta que se está haciendo todo lo contrario, se está desmantelando y esta vez le toca a la agricultura tradicional que se practica en las pedanías.
“Estas nuevas normas y condicionantes son totalmente ajenos a la realidad del campo, diseñadas por personas que no han pisado un bancal en su vida y cuyo único objetivo es hacer inviables las pocas explotaciones familiares que aún quedan, lo único que pretenden es aburrir a quienes trabajan la tierra que heredaron de sus padres, de sus abuelos, para que la abandonen”, ha comentado el edil.
Según la formación, la nueva PAC y su desarrollo legislativo en España obligan a los agricultores que tengan más de diez hectáreas de cultivo a contratar un técnico para que les asesore y será obligatorio tener un “libro electrónico” en el que el agricultor deberá volcar toda la documentación ambiental, las fincas serán monitorizadas por satélite casi a diario, serán obligatorios planes de gestión ambiental, además de un complejo proceso administrativo para poder solicitar las ayudas.
Martínez considera necesario que el Ayuntamiento colabore con interesados y asociaciones agrarias y también con la Consejería, en materia de orientación y asesoramiento poniendo a su disposición medios materiales y personales como ya se ha hecho con otras cuestiones.