“Enfoques” plasma el dolor de lo femenino
La exposición de Armando Buchard es un grito desesperado en defensa de la fragilidad de todo lo que es femenino
El pintor colombiano abre los actos con la exposición Enfoques.
La obra del pintor colombiano Armando Buchard ha sido la encargada de abrir los actos culturales previstos para el mes de diciembre en Águilas. En “Enfoques”, Buchard utiliza una técnica de óleo con base aguada que permite desvelar profundidades. El autor “busca la cotidianeidad, tratando de descubrir la esencia de las personas y las cosas que me rodean”.
Y es por ese motivo por el que en toda la obra se plasman rostros y figuras femeninas, porque para el colombiano “todos tenemos una parte masculina y otra femenina y cuando uno lo encuentra se encuentra a sí mismo, descubre su parte más escondida”, dice Buchard. Pero el artista quiere dejar claro que en Enfoques más que el tema de la mujer se recrea “el dolor de lo femenino y de todo lo que es femenino como la creatividad, la imaginación , la ternura, la bondad…”, señala Buchard.
La obra es un grito desesperado en defensa de la fragilidad de ellas frente a la brutalidad de él y por eso junto con las imágenes distorsionadas se plasman frases como “No me toques”.
No obstante, Armando Buchard deja claro que “las obras se plantean abiertas” y lo interesante es que sea el espectador el que las interprete, “lo que me interesa sobre todo es el estímulo. No planteo mi obra desde lo estético, no busco recrear la belleza, lo que pretendo es conmover y esa conmoción puede ser por crudeza, por tosquedad, por impacto o incluso por rechazo”, señaló el artista.
Artista ausente
Armando Buchard ha sido el gran ausente en su propia exposición y por eso se encuentra “lleno de tristeza porque lo que le importa al artista es el contacto directo con la gente, estar presente ante su reacción cuando ven uno de tus cuadros”. La razón es un supuesto problema de visado, algo que Antonio Jesús García, presidente de la Asociación de Hermandad Hispano Colombiana, considera más bien un veto hacia el artista y hacia el propio arte.