Regalo de Reyes para el Mérida
El Águilas se deja tres puntos en el Rubial, a pesar de jugar uno de los mejores partidos de la temporada
Como reza el dicho: “El fútbol es así”.
Y es que, los hombres de Rivera realizaron un gran partido, fuero superiores al Mérida, pero al final se dejaron tres puntos en el histórico Rubial; una derrota inmerecida que deja a los aguileños fuera de los puestos de play off tras esta primera vuelta del campeonato liguero.
Sin duda, los albiazules merecieron mejor suerte ya que, nada más salir al campo buscaron la victoria y agradar a la afición con un buen partido en casa. Así, las ocasiones no tardarían en llegar, y pronto se llegaría al momento clave del encuentro: Alfonso era derribado en el área del Mérida de manera clara y el colegiado, Figueroa Vázquez, no tardó en pitar el penalti. La sorpresa llegó por parte del lanzador, ya que Edu Espada se apropió del balón y en un claro gesto de egoísmo – ya que es Navarro. De manera habitual, quien suele lanzar los penaltis- envió el balón fuera después de que Rivera no diera el visto bueno desde el banquillo. El fallo clamoroso de Edu Espada cayó como un jarro de agua fría en la afición que, ya desde hace semanas, no ve con buenos ojos la titularidad del delantero aguileño, venido a menos estas últimas jornadas.
Minutos después, el Mérida pareció despertar, al tiempo que cambió la suerte de los albiazules, que vieron como Iván Gómez recibía la cartulina roja tras un mano a mano con el delantero del Mérida Cuevas. Corría el minuto 38 y Luciano no erró el penalti, dándole la vuelta al partido, al tiempo que el Águilas se quedaba con diez.
El la segunda mitad, los aguileños realizaron un juego impecable, con numerosas ocasiones por parte de toda su zaga delantera con Aarón, José García y un inspirado Tariq, pero el balón se negaba a e entrar e, incluso, los aguileños dispararon dos veces al poste.
Bajo esta tónica, con un Águilas acosando la portería visitante, terminaba un partido que los locales merecieron ganar.