Gusta por igual a niños y mayores y su presencia es casi obligada en los hogares españoles cada 6 de enero a la hora del desayuno. Por supuesto, nos referimos al clásico Roscón de Reyes. Una delicia cuyo origen se remonta ni más ni menos que a la época del Imperio Romano y que, según se cuenta, llegó a España de la mano Felipe V en el siglo XVIII.
Lo que hoy te proponemos es una receta para que aprendas a prepararlo de forma casera y sorprendas a los tuyos.
INGREDIENTES:
– 550 g de harina de fuerza
– 25 g de levadura prensada (no congelar porque pierde fuerza)
– 100 g de leche
– 170 g de mantequilla blanda
– 150 g de azúcar (molida hasta conseguir que sea azúcar glas)
– 2 huevos grandes
– ½ copita de ron (opcional)
– 30 g de agua de azahar
– Piel de un limón y de una naranja (recién ralladas)
– 1 pizca de salPara decorar:
– fruta escarchada
– 1 huevo
– azúcar humedecida con agua de azahar y almendra laminada
ELABORACIÓN1.- Calentar la leche a 40ºC, añadir la levadura prensada y deshacer bien en la leche.
2.- Añadir 50 g de harina y amasar formando una bola.
3.- Poner la bola en un recipiente tapado con un trapo húmedo y dejar reposar en un lugar cálido hasta que doble su volumen.
4.- Mientras, formar un volcán con la harina restante e incorporar el resto de los ingredientes y amasar todo hasta obtener una masa compacta.
5.- Una vez conseguido esto, incorporar la bola con levadura reservada y mezclar bien. Si vemos que se nos queda demasiado húmedo y se pega, podemos ir añadiendo algo más de harina de fuerza.
6.- Hacer una bola con esta masa y colocar en un recipiente tapado, cerca de una fuente de calor, aproximadamente una hora y media, o hasta que doble su volumen.
7.- Una vez doblado el volumen, volveremos a amasar un poco para darle su forma definitiva. Es preciso hacer primero una bola a la que haremos un agujero en el centro que iremos estirando para hacer la forma del roscón.
8.- Éste es el momento de introducir la ‘sorpresa’ que deberá estar debidamente envuelta en papel film.
9.- Colocamos el roscón en una fuente de horno, sobre papel sulfurizado, y dejaremos fermentar dentro del horno durante otra hora aproximadamente o hasta que doble su tamaño a una temperatura de unos 40ºC.
10.- Pasado ese tiempo, sacamos el roscón y subimos la temperatura del horno a 180ºC, calor arriba y abajo. Mientras coge temperatura, podemos decorar el roscón. Primero pintamos la superficie con huevo batido, procurando no apretar la masa, y después colocamos las frutas escarchadas, el azúcar humedecido y las almendras laminadas.
11.- Metemos de nuevo el roscón en el horno, a 180ºC, durante unos 20 minutos.
12.- Sacar el roscón ya horneado y dejar enfriar.
Un último consejo para terminar: Procura que, cuando saquemos el roscón, en su última fermentación para decorar, no sufra un cambio brusco de temperatura que haga que se baje.